Inspiración
Arquitectura que abraza la naturaleza: Kéré y Ghotmeh
En un mundo marcado por la urbanización acelerada, cada vez más arquitectos buscan reconciliar el habitar humano con la naturaleza. Dos voces destacan en este camino:
Francis Kéré (Pritzker 2022) y Lina Ghotmeh, reconocida por su enfoque en la memoria y la ecología. Ambos representan una arquitectura sensible, sostenible y profundamente humana.
Francis Kéré: construir con la comunidad
Nacido en Burkina Faso, Francis Kéré ha demostrado que la arquitectura puede ser una herramienta de transformación social. Sus proyectos combinan materiales locales como el barro comprimido, técnicas tradicionales y un fuerte vínculo comunitario.
Con obras como la Escuela Primaria de Gando, Kéré ha mostrado que un edificio puede refrescarse naturalmente, sin depender de sistemas costosos, mientras refuerza el sentido de pertenencia de una comunidad.
La arquitectura no es solo construir, es un acto de esperanza. – Francis Kéré
Lina Ghotmeh: arqueología del futuro
Desde Beirut, Lina Ghotmeh ha construido una carrera que explora cómo la memoria y el paisaje pueden convivir con la innovación. Su proyecto Stone Garden, en Beirut, se levanta como una torre poética en diálogo con la historia y la naturaleza circundante.
Ghotmeh habla de una “arqueología del futuro”, donde la arquitectura excava en el pasado para proyectar un presente más consciente.
Tendencias globales: bioclimática y resiliente
El trabajo de Kéré y Ghotmeh se conecta con tendencias más amplias en la arquitectura contemporánea:
- Bioclimática: edificios que se adaptan al clima local.
- Uso de materiales nobles: barro, piedra, madera.
- Resiliencia comunitaria: proyectos que fortalecen la identidad cultural y social.
Ejemplo: los premios Aga Khan 2025, que reconocieron proyectos sostenibles en Asia y África (Wallpaper).
Conclusión
Tanto Kéré como Ghotmeh nos recuerdan que la verdadera innovación no está en lo futurista, sino en lo enraizado en la tierra y en las personas. Una arquitectura que abraza la naturaleza es aquella que escucha el lugar, que se adapta al clima, que honra la memoria y que construye comunidad.
Más que diseñar edificios, ambos arquitectos están diseñando futuros posibles.
